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Ajedrez Práctico

Alfiles de distinto color

Las posiciones con alfiles de distinto color en ajedrez son bastante frecuentes y difíciles de comprender en algunas ocasiones. Por lo tanto, es conveniente conocer las diferentes situaciones con alfiles de color opuesto, su impacto en el juego y la mejor forma de aprovechar esta circunstancia.

¿Qué son los Alfiles de distinto color en ajedrez?

Esta situación se produce cuando cada bando tiene un alfil y estos actúan en casillas de color diferentes. Este tipo de posiciones son especiales por varios motivos, vamos a ver un ejemplo:

En este diagrama, observamos que hay alfiles de distinto color. El blanco tiene un alfil que actúa por las casillas negras, mientras que el negro tiene un alfil que se mueve por casillas blancas.

Ahora que conocemos el concepto de alfiles de distinto color, vamos a ver su implicación en diferentes aspectos del juego.

Alfiles de diferente color en el ataque

En esta situación, los ataques son mucho más efectivos. Esto se ve reflejado en el siguiente dicho popular «Con alfiles de distinto color, el que ataca tiene pieza de más». Esto se debe a que el bando que está atacando puede hacerlo por las casillas de su propio alfil para que el alfil rival no pueda defender de ninguna manera. Vamos a ver algunos ejemplos:

El blanco está atacando por las casillas negras y vemos que aunque el alfil negro se encuentre cerca de la defensa del rey, no puede hacer nada para evitar la entrada de la dama. Esta pieza no sirve para defender estas casillas, por lo que a efectos prácticos, es como si el blanco tuviera «pieza de más».

En este ejemplo se ve muy claro, todas las piezas blancas actúan sobre el punto f7 (casilla blanca). El alfil de g7 nunca va a poder ayudar en la defensa y, aunque la mayoría de piezas negras están defendiendo este punto, van a perder el peón en la siguiente jugada gracias a la situación de alfiles de distinto color.

Alfiles de distinto color en los finales

En la fase final, se produce una situación completamente diferente. En los finales de partida que únicamente quedan alfiles de distinto color y peones, es muy probable que sea tablas. En muchas ocasiones, aunque haya uno o dos peones de ventaja sigue siendo tablas. Vamos a ver un ejemplo:

En esta posición, el negro tiene dos peones de más pero no puede progresar de ninguna manera por los alfiles de distinto color. El blanco solo tiene que perder tiempos con su alfil cubriendo la casilla b5 y su peón de a4, de esta forma controla los peones negros de a y b. El rey blanco debe quedarse bloqueando al peón de f en una casilla del color contrario a la del alfil rival, de esta forma el oponente nunca va a poder echarle de ahí.

Conociendo estos conceptos, podemos adaptar nuestros planes de partida a estas situaciones.

¿Cómo jugar con alfiles de distinto color?

En este tipo de posiciones, se pueden aplicar los siguientes consejos de manera generalizada:

  • Intenta atacar al rey enemigo a través de las casillas de tu propio alfil. Aprovecha que su alfil no defiende estos cuadros y ataca para tener «pieza de más».
  • Adapta tu estructura de peones para potenciar tu alfil. En el medio juego, coloca tus peones en casillas de distinto color a las de tu alfil, de esta manera haces que tu alfil sea bueno y dificultas la acción del alfil rival.
  • Si quieres ganar la partida, evita cambiar el resto de piezas ya que los finales son muy tablíferos.
  • Si estás en una posición inferior y/o tienes algún peón de menos, intenta cambiar todas las piezas menos los alfiles. De esta manera podrás salvar la partida y llegar a un final con muchas opciones de tablas.

Las posiciones con alfiles de diferente color son muy peculiares y es recomendable conocer cada situación para actuar correctamente y de manera consecuente con el plan de partida. La próxima vez que tengas una situación de alfiles de distinto color, aplica estos consejos y aprovecha los conocimientos estratégicos para ganar la partida.

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